Ohoo: la primera botella de agua comestible

Ohoo: la primera botella de agua comestible

 

Día a día consumimos muchísimas botellas de plástico (entre otros inumerables residuos) que contaminan el medioambiente, pero ¿cuál puede ser la solución a este creciente problema? : botellas de agua comestibles.

 

La solución la han dado tres estudiantes de diseño industrial del Royal College of Art de Londres. Rodrigo García González, Pierre Paslier y Guillaume Couche son los creadores de este invento llamado OOHO.

 

Ohoo es un envase de agua comestible, que permite que el agua se mantenga en su interior del recipiente.

Este recipiente inspirado en la forma de las gotas de agua está elaborado tan solo de algas y cloruro de calcio, mediante la técnica culinaria de la cocina moderna 'esferificación' (popularizada por Ferrán Adriá en el Bulli), la cual permite que el agua permanezca en el interior del envase.

 

La membrana gelatinosa es comestible, higiénica y biodegradable, por lo que cuando tengas sed tan solo tienes que perforarla y beber el agua del interior, y si tienes hambre, te la puedes comer también.

 

 

El proceso de fabricación de este envase natural es muy sencillo. Se congela el agua antes de ser “embotellada” para facilitar el proceso y elegir la cantidad de agua que ha de contener el recipiente. Lleva una doble membrana para proteger el interior higiénicamente.

Esta doble membrana también permitiría poder poner entre ellas una etiqueta sin ningún tipo de adhesivo, para así poder identificar al fabricante y poder comercializarlas. Y además de ser simple y biodegradable, es muy barato. Cada envase cuesta tan solo 2 centavos.

Y si aún así no las quieren comercializar, todos nos podemos hacer nuestras propias botellas comestibles en casa, según explicaron los creadores.

 

Algo similar a este concepto que sí podemos encontrar (aunque en muy pocos lugares) son los Wikipearl, envases naturales que contienen yogur y helados.

 

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